Desde 2021, Palo Alto se integra a la comunidad global de más de 4 mil compañías que son parte de Empresas B, y que trabajan para generar un impacto positivo, apuntando a construir un modelo económico equitativo, inclusivo y regenerativo para las personas, la comunidad y el planeta.

Como viña filial del holding Concha y Toro, y tras un proceso de evaluación que duró más de dos años, Palo Alto logra certificarse como Empresa B. De este modo, Palo Alto es reconocida entre las empresas que cumplen con los más altos estándares en términos de desempeño social y ambiental, transparencia y responsabilidad empresarial.

Bajo esta filosofía, las acciones de cuidado y conservación del medio ambiente son fundamentales. “Nuestros suelos son sustratos vivos donde no solo nacen nuestros vinos, sino que también albergan flora y fauna nativa, y nuestro compromiso como Palo Alto está puesto en su preservación y cuidado”, explica Andrés Vittori, gerente de Marketing de Marcas No Endosadas de Viña Concha y Toro.

Palo Alto cuenta hoy con 1.397 hectáreas de bosque nativo esclerófilo en el Valle del Maule, y 546 de ellas con certificación FSC (Forest Stewardship Council) (FSC ® – C154029). Esta certificación nos compromete a realizar una serie de acciones que buscan conservar, proteger y regenerar esta superficie junto a su flora y fauna.